lo que siempre vuelve

pretextos

prePoemas














Ay, ese siglo diecinueve, tan frío desencarnado pensamiento, siglo XX
cien años para llegar al hielo y no dio tiempo
a vivir en una carne pensada
la fórmula del Norte, guerra fría
enunciación de héroes tan blancos
en la noche de los tiempos
luce esa imagen muerte
esvástica de la ternura tiritando
del suicida vertical [1], de la muerta de hambre [2]
del "aimez moi" con ataque al corazón [3]
del místico silencioso que mira el techo
deslumbrado por la cal oscura [4],
del lúcido cáncer en la boca [5]...
Tras el paladar ciego de la bellota [6]
el recuerdo dulce del amigo, vuelve.

Otro siglo ha de venir
está en camino, han de venir
cien años que incorporen
las mil vueltas necesarias
al hueso acelerado de Odiseo
en el aire del mono sapiens wagneriano
con un vals en el tango giróvago [7]
de la parálisis bajo cero
y darán otro paso errante más mudo mas
con orejas de burro latigado [8], aún más deprisa
en monte del cíclope unicornio, del desastre
del error repetible y el hierro sin diamante
del sufrir para evitar el herrante dolor
que zafado regresa y te encuentra
de nuevo en la esquina vacía
de la eterna nada donante.
No tampoco esa fórmula es la fórmula
ni el olvido ni el frío se mueven
la cruel imagen congelada
tan sólo es imagen, de un cálculo
inexacto el decimal sobrante: la falta
de donde surge y no basta el pensamiento.

No se puede huir de la mirada
del amor, de la locura, de la muerte
lo que te ha tocado en lo intangible
allá donde lo esquives vuelve
si exiliado de tu interior, de fuera vuelve
en un lugar otro, con o sin máscara
de uno u otro modo vuelve, vuelve
la muerte repudiada ha de volver,
la locura y el amor que no has pedido
el quién, el ese no sé qué que siente
que duele y goza en ti, retorna, vuelve
desde los confines de un tiempo inmemorial,
una y otra vez vuelve. Siempre vuelve.



lisi prada


[1] "Afectado por una grave insuficiencia respiratoria, Deleuze se suicidó el sábado 4 de noviembre de 1995 lanzándose por la ventana de su apartamento de la avenida de Niel en París. Esta muerte trágica se suma a la muerte de Foucault (que murió en 1984 víctima del sida), al suicidio de Guy Debord y de Nikos Poulantzas y a la muerte de Althusser (murió en 1990 ingresado en un psiquiátrico después de haber asesinado a su mujer), y cierra un sombrío destino de la llamada escuela de París de los años 60-80."

Diccionario de filosofía Herder S.A., Barcelona. ISBN 84-254-1991-3

[2] Simone Weil, murió de hambre. "Su solidaridad con los franceses de la zona ocupada le lleva a negarse a comer más de lo que ellos comían; esta anorexia voluntaria agrava una recién diagnosticada tuberculosis, y muere el 24 de agosto de 1943"

La levedad y la gracia. Trotta, 1994.

[3] Leopold von Sacher-Masoch murió de un ataque al corazón y fueron "aimez moi" sus últimas palabras.

[4] Lacan pasó sus últimos días enajenado, sentado en un sillón mirando al techo. Así lo cuenta una de sus "criadas". "Afectado de trastornos cerebrales y una afasia parcial, Lacan murió el 9 de septiembre de 1981 en la clínica Hartmann de Neuilly, después de la ablación de un tumor maligno de colon.".

Lecturas del Psicoanálisis. Diccionario

[5] Sigmund Freud tuvo una muerte dolorosa. En 16 años tuvo 31 operaciones quirúrgicas en su mandíbula cancerosa y en su cavidad bucal Cuando los dolores se le hicieron insoportables, le dijo a su amigo y médico particular Max Schue en una estilizada despedida que ya había leído su último libro, Le peau de chagrin, de Balzac. Le recordó también una promesa anterior de "ahorrarle los últimos dolores". Schuer le inyectó dos veces morfina en un intervalo de 12 horas y ya no salió de coma. El cadáver fue incinerado el martes siguiente y sus ceniza fueron a dar a un vaso griego antiguo, su pieza favorita, regalo de Marie Bonaparte, amiga y protectora de Freud -descendiente de Lucien Bonaparte. El servicio fúnebre fue sobrio y en él hablaron sus amigos de siempre: Stefan Zweig y Erris Jones.

Un profeta sin Dios. Vivianne Schnitzer. EL PAÍS - Cultura - 23-09-1989.

[6] "Prohíbo absolutamente que mi cuerpo sea abierto bajo ningún pretexto. […] Una vez recubierta la fosa, será sembrada de bellotas [nota: ¿no son alimento de cerdos y cabras?] a fin de que el terreno y el soto vuelvan a encontrarse tupidos como eran antes y las huellas de mi tumba desaparezcan de la superficie de la tierra, como espero que se borre mi memoria de la mente de los hombres, excepto un pequeño número de los que han querido amarme hasta el último momento y de los cuales me llevo a la tumba un recuerdo muy dulce."

Testamento del Marqués de Sade. En Level, 1994, pg. 520-521

[7] Paul Celan se quitó la vida arrojándose al Sena, el 20 de abril de 1970.

Cavaron y no oyeron nada más. / No se hicieron más sabios, / No inventaron canción alguna, / No idearon ningún lenguaje. / Cavaron. / / Vino una calma, / vino también una tormenta, / vinieron los mares todos. / Yo cavo, / tú cavas, / y cava también el gusano. / Y lo que canta allí, dice: / “Ellos cavan”. / Oh, uno, / oh, ninguno, / oh, nadie, / oh, tú. / ¿Hacia dónde fue, / ya que no fue a ninguna parte? / Oh, tú cavas / y yo cavo hacia ti, / y en el dedo asoma el anillo.

"Es el símbolo del anillo de boda, del anillo de la identificación para los que no tienen nombre, para los que cavan esa fosa en la tierra, pero también en el aire, en el olor a almendra de los gases que los envuelven. Paul Celan escribió también, primero en lengua rumana que alemana, un poema que tuvo otro título antes de volverse uno de sus poemas emblemáticos, Fuga de la muerte; alude a la fuga musical. Cuando lo publicó primero en rumano, se llamó Tango de la muerte. En esos campos de concentración, la gente creaba pequeños grupos musicales para cantar y recordar, para sentirse menos desamparados. Hay una foto muy conmovedora en que se muestra a un grupo de judíos que había hecho una suerte de violín con palos y cuerdas. Alguna de las canciones que cantaron en aquellos tiempos fueron tangos.".

La poesía, la enfermedad, el dolor..

[8] Se dice que encontrarse con un carretero que golpeaba brutalmente a su jamelgo, Nietzsche se cayó de rodillas pidiéndole que parase, le quitó el látigo y besó en la frente al caballo. Poco después lo internaron en el psiquiátrico de Basilea.

Producciones

Inmateriales

Producciones Inmateriales Producciones Inmateriales Producciones Inmateriales Producciones Inmateriales Producciones Inmateriales Producciones Inmateriales